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17 diciembre, 2012

¿Embarazada en Navidad? No te pases con las comidas

La Navidad es una época del año repleta de comidas, cenas, despedidas y celebraciones en las que fácilmente se pueden coger unos kilitos de más. En sólo 15 días se pueden llegar a aumentar entre 2 y 3 kilos de peso, así que no te pases con las comidas, especialmente si estás embarazada.

Los excesos en las comidas navideñas son difíciles de controlar, por eso te daremos algunos consejos para disfrutar de estas fechas sin aumentar de peso, así como para controlar los peligros de algunos alimentos.

Limitar las cantidades

Es preferible picar un poco de todo, variando en las comidas que comer mucho de una sólo cosa. Así podrás probar de todo, pero controlando las raciones. Evita cantidades abundantes, no sólo por el posible aumento de peso, sino también para facilitar la digestión.

Si comes pequeñas raciones ligeras a lo largo del día serán más fáciles de digerir que un plato demasiado abundante. Recuerda que durante el embarazo, sobretodo en el primero y el tercer trimestre, la digestión de la embarazada se vuelve más lenta y pesada.

Puedes, pero con control

Los turrones, mazapanes y dulces navideños son un gusto que no pueden negarte, pero debes saber controlar.

Evita también los alimentos ricos en grasas, así como los que son demasiado salados (evita añadir sal extra a los platos) y azucarados. Prefiere platos de elaboración casera a los de elaboración industrial.

Alimentos prohibidos

El jamón es un clásico en estas fechas, así como los embutidos, pero recuerda que en el embarazo no debes comer carne cruda por el riesgo de toxoplasmosis, si no has pasado las pruebas. Aún cuando hay estudios que descartan la relación entre el jamón y la toxoplasmosis y que previamente congelado es apto para el consumo, es mejor prevenir cualquier riesgo y evitar su consumo.

Otro alimento que es prohibido en el embarazo es el pescado o marisco crudo o poco cocinado, así como los ahumados. Nada de sushi, de ceviche o de cualquier plato que incluya pescado o marisco sin cocinar en su preparación.

También importa la forma de cocinar los alimentos

Planea un menú navideño con opciones saludables, tanto en los platos elegidos como en la forma de cocinarlos.

Prepara variedades de ensaladas. Hay algunas recetas muy creativas que le tan un toque de frescura a los platos.

Elige también verduras asadas, una opción ideal como guarnición, y a la hora de elegir los platos de carnes, elige las menos grasas como el pavo, el pollo o el pescado cocinadas a la plancha o asadas, antes que otras como el cordero, por ejemplo, ya que son más fáciles de digerir.

Los huevos también son un alimento que debes cocinar con seguridad, evitando dejar dejarlos sin cuajar, así como las tortillas con huevo líquido en su interior por mucho que nos gusten. También es importante guardar en la nevera los alimentos ya cocinados que lleven huevo.

Cero alcohol

Ya hemos advertido varias veces en el blog sobre los riesgos del alcohol en el embarazo.

No hay una dosis segura de alcohol. Hay quienes creen que “total, por una copita no pasa nada”, pero cada mujer asimila una copa de alcohol de forma diferente, por tanto la recomendación es ni una gota de alcohol.

En cambio, bebe mucha agua para mantenerte hidratada y ayudar a la digestión.

Otras recomendaciones
  • Evita los atracones, come lentamente y mastica bien los alimentos.
  • Haz una pausa y levántate de la mesa entre plato y plato para facilitar la digestión.
  • Evita las bebidas con gas.
  • Al final de la comida, mejor una infusión digestiva como la manzanilla o el anís antes que un café.