Es muy importante que nuestros hijos se alimenten de edad temprana equilibradamente y que poco a poco le incorporemos alimentos como los vegetales y las frutas, no les debe faltar en su dieta, acelga, repollitos, coliflor, hinojo, alcachofas, champiñones, patata, zapallo, zanahoria entre otros.
Así como tampoco el aporte de las frutas que son muy ricas en vitamina C , e importantes para que se mantengan sanos, no nos olvidemos de los cítricos, la sandía y el melón que casi siempre son gustos bien recibidos por los niños.
Al momento de preparar las verduras, hay que higienizarlas correctamente bajo la canilla de agua y no remojar por encima, se la debe cortar en trozos grandes para que no pierda sus valores nutritivos, cocinarlas con cáscara es una excelente opción en aquellas que lo permitan, y no agregar demasiada agua a la cocción para que no pierdan sus valores minerales y vitamínicos dejándolos en el agua.
Hervirlos en una olla tapada, tratar de cocinar durante poco tiempo y no dejar pasar los puntos de cocción, y aprovechar el líquido de la cocción para realizar sopas y purés, ya que es allí donde suelen quedar el mayor número de nutrientes.
