Enhorabuena si tuviste un parto natural porque tu recuperación será rápida y exitosa. Sin embargo, después de tan duro trabajo el cuerpo necesita un merecido descanso para recuperar sus fuerzas.
Si bien el bebé necesita toda tu atención durante sus primeros días, tú también necesitas prestarle atención a tu salud para que estés en las condiciones de atenderlo como se merece.
El bebé es exigente de día y de noche, ¿qué hacer para lograr unos momentos de descanso para recuperarte?
- Reduce las responsabilidades: tienes que dejar las tareas domésticas a un lado, las únicas cosas que deben ocupar tu mente es atender a tu hijo y cuidarte a ti misma.
- Duerme mientras el bebé lo hace: aprovecha estas horas para una siesta. Ganas no te faltarán, ya que cuando das de lactar, las hormonas que producen leche materna también producen sueño.
- Limita el número de visitas: todos quieren conocer al bebé, pero ser anfitriona es una labor fatigante que resta horas a tu descanso. No temas es disculparte, ellos comprenderán.
- Toma un paseo: si hay un parque o lugar apacible por donde vives, da un paseo relajante para liberarte de la ansiedad de estar todo el día en casa. Puedes hacerlo con tu bebé si lo deseas.
