El mundo está repleto de diversidad. Hay diferentes culturas, diferentes razas, diferentes géneros y diferentes lenguas (entre otras cosas, por supuesto).
Y esas diferencias seguirán aumentando, a medida que la población del mundo crece y se vuelve más diversa étnica y racialmente.
Los niños pequeños son muy curiosos, y es normal que a medida que crecen comiencen a interesarse por las diferencias de su entorno. Los niños se interesan por esas diferencias. Preguntan por las características físicas, las características lingüísticas y demás.
Los niños quieren saber por qué las demás personas tienen diferentes colores de piel, diferente color de pelo, rasgos faciales distintos y varias texturas de cabello.
Muchos padres no están preparados para responder esas preguntas, por lo que se sienten molestos o incómodos con ellas. Sin embargo, hay que estar preparados. Es necesario educar a nuestros hijos desde la diversidad y la tolerancia.
Cuando su hijo pregunta sobre las diferencias raciales, usted tiene una muy buena oportunidad para educarlo y enseñarle respeto por todos los seres humanos.
La mejor forma de sentar una base sólida para la comprensión y la tolerancia, es educando a nuestros niños de pequeños.
La tolerancia no surge de sentir al otro idéntico, sino que nace de un proceso de reconocimiento del otro y sus diferencias.
Yo respeto al otro, no porque es idéntico a mí, sino justamente porque es distinto y yo también soy distinto a él. Y es en esa diferencia, que nos aceptamos y nos respetamos.
31 julio, 2009
Cómo hablar con su hijo de la diversidad
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Niños