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22 abril, 2009

Vitamina A y el embarazo

La vitamina A (retinol) cumple diversas funciones en el organismo siendo muy necesaria a cualquier edad por sus beneficios en la visión, la piel, las membranas mucosas, dientes, el tejido blando y esquelético, crecimiento, sistema inmune, nevioso, así como en el aprovechamiento del hierro; pero es fundamental durante el embarazo, debido a que también interviene en el desarrollo del bebé.

Se necesitan aproximadamente 800 microgramos de vitamina A diarias, lo que se obtiene en 1 zanahoria mediana por ejemplo. Otras fuentes de esta vitamina son la leche y sus derivados, especialmente aquellos que contienen más grasa como la mantequilla, la yema de huevo y el hígado (de res, pescado, etc.); en las verduras y hortalizas de color amarillo o anaranjado como la mandarina, el tomate, el pimiento rojo, el rocoto, diversos ajíes, el zapallo, albaricoque, nísperos. También se encuentra en otros vegetales de color verde (ya que el verde es muy fuerte y enmascara al amarillo).

Si bien es muy necesaria, el exceso de vitamina A puede resultar peligrosa, ya que se trata de una vitamina Liposoluble, es decir, su estructura es grasa y se disuelve en la grasa y no en el agua, por lo que no puede ser eliminada en la orina y se acumula en el organismo.

Consumir más de 3000 microgramos por día durante el embarazo puede ocasionar malformaciones en la cara y cráneo del bebé como defectos del pabellón auricular, ceguera, atrofia ósea (frente, nariz pequeñas, ojos separados). También puede provocar lesiones cardíacas, del sistema nervioso e inmunitario y hasta la interrupción del embarazo.

Es muy difícil que sufra una sobredosis consumiendo alimentos que son fuente de vitamina A; sin embargo los medicamentos como los multivitamínicos, las pastillas para la visión, tratamientos del acné, psoriasis, mastopatía escleroquística, los complementos alimenticios para acelerar el bronceado o para la protección de la piel sí pueden aportar una sobrecarga de la vitamina y poner en riesgo el embarazo.

Por eso siempre, pero más aún si se encuentra en la Dulce Espera, debe consultar al médico o nutricionista antes de comenzar a tomar cualquier suplemento, complemento o multivitamínico, pues éstos también son medicamentos.

Via: webdelbebe