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07 agosto, 2013

Algunas señales en las dos semanas previas al parto

Las mamás primerizas tienen mucha ansiedad por saber cómo notar que el parto está por ocurrir. Es así que buscan la manera de predecir que el momento tan esperado del nacimiento se acerca. Por ello, compartamos algunas señales de que el parto comenzará, que ocurren en las dos semanas previas al parto.

Las contracciones previas al parto suelen hacer su aparición en los momentos de mayor cansancio; esta contracción endurece el abdomen pero es indolora.

La anatomía uterina también varía, pues comienza a contraerse junto con el abdomen y se siente en la pelvis esa contracción, que durará unos cinco minutos y puede ser dolorosa.

Las contracciones de Braxton-Hicks se vuelven más frecuentes en los días previos para ayudar a madurar al cuello uterino. Sin embargo, si las contracciones no aumentan de manera constante su duración, ni intensidad ni se dan cada vez más cerca una de la otra, causando que el cuello del útero dilate de manera progresiva, es probable que tan sólo sea una falsa alarma.

Los pechos se preparan para la lactancia, inflamándose y poniéndose duros, en algunas mujeres puede comenzar a salir calostro de los pezones.

El útero oprime tus pulmones, el estómago y la vejiga, con lo cual te costará respirar, deberás orinar con frecuencia y padecerás de acidez estomacal.

Pero al mismo tiempo, el bebé comenzará a descender en la pelvis, si es tu primer bebé, unas semanas antes del comienzo del parto puedes percibir como el niño se encaja en el canal de parto.

Esto significa que el bebé baja por la pelvis, preparándose para nacer, lo cual hará que sientas más peso en la pelvis, pero alivio para respirar y menos presión en el tórax.

Si el cuello del útero comienza a dilatarse al aproximarse el momento del parto, puedes expulsar el tapón mucoso, que se percibe como un flujo espeso que es el que ha mantenido sellado el útero todo este tiempo. Algunas mujeres lo pierden de una sola vez, mientras que otras lo hacen durante varios días. Se puede presentar algo de sangre en el flujo, lo que le da un color amarronado, rosa o rojizo. Un tacto vaginal – que el médico realiza para comprobar cómo va el cuello uterino – como también las relaciones sexuales, pueden afectar el tapón mucoso, aunque todavía falten algunos días para que el bebé nazca.

Con estas señales, podrás saber que tu bebé pronto nacerá.