A continuación te describimos las posibles soluciones para saber porqué no produces la leche suficiente para tu bebé.
•Observa si tu bebé, mientras mama, realiza una correcta adhesión boca-pecho. Es ese movimiento lo que realmente estimula bien la mama.
•Asegúrate que el bebé se prende bien al pezón y parte de la aréola. De esta manera, se vacían eficientemente los pechos y se logra un aumento en la producción de leche.
•Aumenta el número de tomas diarias: la frecuencia de éstas -8 a 12 tomas cada 24 horas- ajustará la producción para adecuarla a las necesidades del bebe.
•No tomes vitaminas recetadas para el período pre-natal. No son indicadas para el período de lactancia y pueden disminuir la producción de leche.
•Procura descansar el mayor tiempo que sea posible. Toma siestas todos los días o realiza 20 minutos de relajación.
•Bebe bastante líquido, por lo menos 2 o 3 litros por día de agua, jugos, caldos, leche. Evita excesos de té, café, mate o bebidas gaseosas.
•Busca ayuda de tu pareja, amigos y familiares para tus actividades cotidianas.
•Ingerir semillas como el girasol, sésamo, lino, o granola con pasas de uva, nueces o avellanas. Te permitirán energizarte para sobrellevar la baja producción de leche.
•Relaja tu mente y cuerpo al momento de dar de mamar: esto favorece todo el proceso. Siéntate, afloja los músculos de la cara y hombros antes de amamantar. De esta manera, la mamá y el bebé logran disfrutar con tranquilidad de los beneficios de este momento tan especial.
