Es que las várices en el embarazo son un problema habitual, debido a la dificultad que tiene la circulación de retorno en las piernas para funcionar debidamente, por el peso del bebé y su bolsa en especial a medida que avanza la gestación. Las llamadas arañitas son la primera fase de este problema. Y las medias de compresión, se ofrecen como una solución a este problema, y una forma eficiente de prevenir las várices.
Durante el embarazo, el nivel de sangre en el cuerpo aumenta, pero al mismo tiempo disminuye el que se dirige a la zona pélvica, para asegurar el bienestar fetal. Esta dificultad circulatoria hace que se inflamen los vasos sanguíneos de las piernas, y aparezcan las famosas arañitas, que tienen su particular color azul porque es sangre desoxigenada. Suelen hacerse notar en el tercer trimestre del embarazo. Si el problema ya estaba presente desde antes, la situación se verá más potenciada.
Las medias de compresión pueden usarse durante todo el día, tienen la finalidad de ejercer una presión suave y consistente sobre las piernas, para ayudar a que la sangre circule en forma más eficiente y así se evite la aparición de las arañitas y várices.
Un estudio realizado en Suiza en 2001, determinó que si bien las medias de compresión no evitan la aparición de várices, sí es cierto que las hace menos visibles y severas. Además, estas mujeres estudiadas aseguraron tener muchas menos molestias en las piernas que aquellas que no las utilizaron, razón por la cual podrías hablar con tu médico sobre la posibilidad de usar estas medias.
Estas medias se compran en farmacias o hasta con receta médica, y debes seguir algunos consejos para comprarlas. Mide la longitud de tus piernas con cinta métrica, así compras las medias del tamaño adecuado. Procura que tus medias sean fuertes, pero no excesivamente ajustadas.
En caso de que sufras de artritis o manos débiles, podrías tener dificultades para ponerte las medias, pero existen opciones para ayudarte a ello.
