-

27 junio, 2011

Cinco enemigos tóxicos de los niños en el hogar

Expertos basados en nuevas investigaciones, recomiendan a los padres resguardar a sus hijos de cinco enemigos tóxicos medioambientales que están en el hogar. Vamos a ver cuáles son.

La Asociación Canadiense para la Salud de la Infancia Salud y el Medio Ambiente (CPCHE, sus siglás en inglés), es quien dio a conocer estas nuevas recomendaciones para padres.

El polvo es una fuente de contaminación, ya que allí pueden depositarse partículas tóxicas como el plomo, que afecta el cerebro en desarrollo. Por ello, conviene aspirar y pasar un paño húmedo por las superficies a diario. También se puede prevenir la acumulación de polvo manteniendo el orden, quitándose los zapatos, evitando cortinas o tapetes de telas muy pesadas, evitando el almacenamiento de juguetes.

Los expertos recomiendan utilizar los productos de limpieza menos tóxicos que se puedan, por ejemplo el jugo de limón, el bicarbonato y el vinagre blanco sirven para limpiar muchas superficies. También se sugiere lavar las manos con frecuencia, evitando los jabones antibacteriales como así también el detergente y todo lo que sea tóxico para los niños.

Si se realizan reformas en el hogar, deben mantenerse a embarazadas y niños alejados de ellas. Pinturas, pegamentos, disolventes y otros químicos son malos para su salud, por ello se recomienda sellar la zona en obras con hojas de plástico para ’separarla’ del resto de la casa y limpiar cuidadosamente el polvo durante y después de cualquier proyecto de reparación en el hogar.

También se puede elegir productos con el menor nivel de toxicidad posible.

Los plásticos suelen tener Bisfenol, un químico muy nocivo y que está presente en bidones de agua (dispensadores), biberones, ‘tupper’ y otros. Por ello, la recomendación es no colocar recipientes de plástico en el microondas, incluso si la etiqueta dice ’seguro para microondas’, porque sus productos químicos pueden migrar a los alimentos o bebidas. También hay que tener cuidado con los juguetes para la dentición y todos aquellos que sean plásticos y los niños puedan llevarse a la boca, y que contengan policloruro de vinilo (PVC).

Por último, hay que evitar determinados pescados para no exponer el cerebro en crecimiento al mercurio. Los expertos aconsejan la elección de variedades de pescado con bajo contenido en este mineral como la caballa del Atlántico, el arenque, la trucha, el salmón salvaje o en lata, entre otros.

Por ello, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición dio a conocer una recomendación para contemplar de aquí en más: “Las mujeres embarazadas, en periodo fértil o de lactancia y los niños menores de tres años deben evitar el consumo del pez espada, el tiburón y el atún rojo. Los menores de tres a 12 años deben limitar el consumo a 50 gramos a la semana o 100 en dos semanas”.