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30 noviembre, 2010

Controlando las necesidades consumistas de los niños

Los mejores clientes de los supermercados son los padres que acuden con sus hijos, porque acaban llevándose a casa unas cuantas cosas que no tenían previstas y porque acaban comprando marcas con las que no contaban porque junto con los productos vienen de regalo artículos que llaman la atención de los niños.

Bien, pues para evitar esto hay algunas soluciones que pueden llevarse a cabo. Una de ellas sería, directamente, ir a comprar sin los niños, mientras están en el colegio o quedándose con otra persona para evitar que los ojos salten de sus órbitas pidiendo y pidiendo.

Otra sería dialogar y negociar con los niños mientras estamos allí. Podemos acceder a comprar algo de lo que nos piden a cambio de no comprar otras cosas que también querrían tener o simplemente comprar sólo lo que necesitamos porque “lo siento, pero no podemos gastar en cosas que no necesitamos”, según cada padre o madre decida en cada momento.