A pesar de que muchas mujeres puedan sentirse menos deseosas de tener encuentros íntimos con sus parejas durante el embarazo – debido entre otras cosas a los cambios en el estado de ánimo por las hormonas alteradas y los cambios en la imagen corporal –, lo cierto es que un estudio corrobora que el deseo y satisfacción sexual no disminuyen con el embarazo.
El estudio proviene de Lisboa, donde se encuestó a 188 mujeres tras dar a luz sobre su vida sexual en el embarazo, y si bien los encuentros son más espaciados debido a las incomodidades especialmente a medida que el embarazo avanza, lo cierto es que la mitad de ellas afirmó que su deseo sexual permaneció igual.
EL 80,1% de las mismas aseguró haber mantenido relaciones en la etapa final, y casi el 40% lo hizo en la semana previa al parto.
La mitad, sin embargo, admitió que tuvo más frecuencia sexual en el primer trimestre, mientras que poco más de la tercera parte, tuvo mayor frecuencia en el segundo trimestre.
Algunos mitos y miedos, como que los esposos no se sienten cómodos con la idea de tener sexo con sus mujeres embarazadas y el temor a dañar al bebé, fueron también frecuentes.